El ministerio de Seguridad – a través de la Subsecretaría de Seguridad Vial- valoró la incorporación de 15 alcoholímetros para garantizar los recursos en los controles preventivos que se realizan a lo largo del territorio provincial.
La actividad se realizó en las instalaciones de la sede central de la APSV en Rawson con la presencia del Subsecretario de Seguridad Vial, Néstor Siri; la subsecretaria de Control y Gestión, Alejandra Paz; el subsecretario de Seguridad y Relaciones Institucionales, Rubén Becerra, la Directora Gral. de Seguridad Vial Bárbara Barros y el personal que cumple funciones en el organismo.
Al respecto, Siri explicó “la Agencia Nacional de Seguridad Vial juzgó necesario y conveniente entregar a nuestra Agencia Provincial de Seguridad Vial acorde a toda la tarea que vinimos desarrollando. Desde que nos hicimos cargo –en agosto de año pasado- estábamos reclamando alcoholímetro porque surge la necesidad de tener todo el material adecuado para los operativos”.
“Cada valija con todos los componentes del alcoholímetro ronda los USD 8500, aproximadamente. Es un material caro e importante que se convierte en una herramienta fundamental para desarrolla nuestro trabajo cotidiano”, precisó.
“Todo el equipamiento se va a distribuir a lo largo de las 11 bases operativas de la APSV en toda la provincia. Habrá algunos más en los lugares donde exista un mayor movimiento vehicular o tengamos un mayor requerimiento”, anticipó.
“Ahora tenemos todo el equipo listo para trabajar durante la temporada de verano sin inconvenientes. Los preventores viales hacen las tareas de medición y prevención quienes se capacitan -permanentemente- y reciben una certificación de la Agencia Nacional de Seguridad Vial”, destacó el funcionario provincial.
A su vez, el funcionario provincial subrayó que los controles aumentaron y la incidencia de conductores que manejan bajo los efectos del alcohol descendió en los últimos meses. “Se observa una mayor conciencia de la ciudadanía en el cumplimiento de estos temas”, subrayó Siri.
De todos modos, las campañas preventivas de concientización se van a intensificar de cara al próximo verano y al desarrollo de las Fiestas Populares porque la eventual presencia de conductores alcoholizados constituye un riesgo para la integridad física de los tripulantes del propio vehículo, para terceros y los ocasionales transeúntes.